El cazador de almas perdidas – Creepy pasta 78.
La Batalla Final.
El túnel estaba envuelto en una oscuridad pesada y abrumadora, apenas iluminado por las llamas sobrenaturales que ardían en el aire. El demonio mayor se mantenía en pie en el centro, rodeado de sombras y espíritus que se arremolinaban a su alrededor, extendiendo su poder más allá de lo imaginable. Fabián, Drex y el equipo de Oricalco luchaban por resistir, pero el demonio era una fuerza casi imparable, empujándolos más allá de sus límites.
Tatiana jadeaba, su cuerpo agitado después de liderar al equipo a través de lo que parecía una batalla interminable. Sabía que, sin refuerzos, este podría ser su último enfrentamiento. Y entonces, lo sintió. Una presencia familiar, tranquila y poderosa.
María.
A pesar de la distancia que las había separado durante tantas batallas, Tatiana sabía que María no dejaría que su hermana enfrentara sola un peligro tan grande. Y aunque María rara vez participaba en combates directos, su poder espiritual y clarividente era innegable. Ahora, mientras el demonio rugía con una furia salvaje, Tatiana sintió la conexión entre ellas crecer con intensidad.
—¡María está cerca! —gritó Tatiana, con un renovado sentido de esperanza.
Drex, aún en su forma licántropa, golpeaba al demonio con una furia desenfrenada, pero el monstruo simplemente desviaba los ataques con sus enormes brazos y sombras que se movían a su voluntad. Fabián, jadeando mientras intentaba mantener la concentración en sus rezos, estaba casi agotado. Sabía que necesitaría algo más, algo sagrado, para inclinar la balanza en su favor.
Y entonces, como si el destino hubiera intervenido, una luz suave y cálida iluminó el túnel. María había llegado.
La Llegada de María
María apareció en el borde del túnel, sus ojos llenos de determinación y su porte calmado, como si hubiera estado esperando este momento. Entre sus manos llevaba varios papeles sagrados, cubiertos con símbolos arcanos y espirituales. Eran talismanes, artefactos que había preparado en un momento de clarividencia. Había visto esta batalla antes de que comenzara, y sabía lo que debía hacer.
—Sabía que esto sucedería —murmuró María mientras avanzaba, su energía mezclándose con la de Tatiana.
Las dos hermanas rara vez luchaban juntas, pero cuando lo hacían, su poder aumentaba exponencialmente. La conexión espiritual entre ellas, fortalecida por años de prácticas místicas, les permitía combinar sus habilidades de clarividencia, magia wicca, y lo que quedaba de su conocimiento arcano. Juntas, eran mucho más fuertes que por separado.
Tatiana asintió hacia María, sabiendo que el tiempo para hablar era mínimo. María comenzó a desplegar los papeles sagrados, preparando un ritual de purificación que debilitaría al demonio lo suficiente para que los rezos de Fabián y la fuerza bruta de Drex pudieran finalmente hacer efecto.
El Ritual de Purificación.
Mientras María comenzaba a distribuir los talismanes sagrados alrededor del demonio, Fabián, con su crucifijo en la mano, comenzó a recitar una nueva oración, esta vez fortalecida por la presencia de María y Tatiana. Sus palabras resonaban con más poder, y el túnel se llenó de una luz cálida y sagrada, cortando a través de la oscuridad.
—”Oh Señor, purifica esta tierra de las criaturas de oscuridad que la corrompen. Que tu luz destierre a los demonios de las sombras y les niegue el dominio de este mundo” —recitó Fabián, su voz resonando con una intensidad renovada.
El demonio mayor, sintiendo que el ritual estaba debilitando su poder, lanzó un rugido ensordecedor y se volvió hacia Fabián. Con una velocidad asombrosa, el demonio lanzó un ataque directo hacia el sacerdote guerrero, intentando acabar con él antes de que el ritual pudiera completar su efecto.
El Sacrificio de Óscar.
Óscar, quien había estado luchando con su último aliento, vio el ataque venir y, sin dudarlo, se lanzó frente a Fabián, interponiendo su cuerpo entre el demonio y su objetivo. Aunque vampiro, Óscar sabía que no podría resistir un golpe tan poderoso. Sin embargo, su lealtad y valor no conocían límites.
El impacto fue devastador. El cuerpo de Óscar fue lanzado contra la pared del túnel con una fuerza tal que el eco del golpe resonó por todo el espacio. Pero su sacrificio había salvado a Fabián, quien, aunque gravemente afectado por la energía oscura del demonio, aún se mantenía en pie, apoyado en su crucifijo.
—¡Óscar! —gritó Tatiana, su corazón hundiéndose al ver a su compañero caer.
Pero no había tiempo para lamentarse. El ritual debía continuar, y con la ayuda de María, Tatiana colocó los talismanes sagrados alrededor del demonio, creando una barrera que comenzaba a contenerlo.
Drex, que había sido empujado hasta su límite físico en su forma licántropa, seguía luchando. A pesar de las heridas, sabía que debía seguir adelante. Pero cada segundo que pasaba, sentía su cuerpo ceder. Su transformación lo había llevado al borde del agotamiento, y sabía que estaba cerca de perder el control. Sin embargo, la visión de Tatiana, María y Fabián luchando tan ferozmente lo mantuvo enfocado.
—Solo un poco más —gruñó Drex, mientras lanzaba un último ataque brutal hacia el demonio.
La Defensa Final del Demonio.
El demonio, al darse cuenta de que estaba siendo contenido por los talismanes y que su poder estaba siendo debilitado por el ritual, lanzó un último ataque desesperado. Con un rugido inhumano, canalizó todas las sombras y espíritus a su alrededor y los dirigió hacia María.
La barrera de talismanes brilló intensamente cuando el ataque la golpeó. Las protecciones que María había establecido comenzaron a temblar bajo la presión del ataque del demonio. Las sombras se retorcían y los espíritus aullaban, intentando romper las defensas espirituales que protegían al equipo.
Pero los talismanes sagrados, alimentados por la magia de María y el poder espiritual de Tatiana, resistieron. El ataque del demonio fue detenido, pero la fuerza del impacto fue tal que el túnel entero comenzó a temblar.
—¡Resistan! —gritó Tatiana, su cuerpo exhausto pero su mente aún enfocada.
El demonio, ahora debilitado y contenido por el poder del ritual, comenzó a perder fuerza. Su enorme cuerpo se retorció, y las sombras que lo rodeaban comenzaron a desvanecerse. Pero aún no estaba acabado.
Con un último aliento, el demonio mayor lanzó una última onda de energía hacia María. Pero antes de que el ataque pudiera alcanzarla, los talismanes que había desplegado alrededor de sí misma brillaron con una luz cegadora, bloqueando la mayor parte del impacto. María apenas fue empujada hacia atrás, ilesa gracias a las protecciones que había preparado.
El Demonio es Derrotado.
Con el demonio finalmente debilitado, Drex, aún en su forma licántropa, se lanzó hacia la criatura con un último rugido de furia. Sus garras atravesaron la carne del demonio, desgarrando su oscuro cuerpo. Al mismo tiempo, Fabián, con su último aliento, levantó su crucifijo y recitó las palabras finales del ritual.
—”Por el poder de Dios, te destierro de este mundo. Regresa a las sombras de donde viniste.”
El demonio mayor, atrapado en medio del ataque de Drex y los rezos de Fabián, dejó escapar un último rugido antes de que su cuerpo se desintegrara en una nube de sombras y sangre. El aire en el túnel se llenó de un silencio aterrador mientras el demonio se desvanecía por completo, derrotado.
Pero la victoria había tenido un costo muy alto.
Las Secuelas de la Batalla.
Fabián cayó de rodillas, su cuerpo gravemente herido por el poder oscuro del demonio. Jadeaba, casi sin fuerzas, mientras intentaba mantenerse consciente. Tatiana corrió hacia él, preocupada por su estado.
—¡Fabián! —gritó, agachándose a su lado.
El sacerdote guerrero apenas pudo esbozar una débil sonrisa, sabiendo que había cumplido su deber, pero su cuerpo estaba en un estado crítico.
—Lo logramos… —murmuró Fabián, antes de cerrar los ojos, perdiendo el conocimiento.
Tatiana sabía que tenían que llevarlo a un lugar seguro para recibir tratamiento, pero él no era el único en peligro. Drex, después de haber regresado a su forma humana, estaba tendido en el suelo, gravemente herido y agotado hasta el límite. Su cuerpo estaba cubierto de cortes y sangre, y respiraba con dificultad.
María, aunque casi intacta gracias a las protecciones, se acercó a Drex y lo examinó rápidamente.
—Estará bien —dijo María, aunque su rostro mostraba preocupación—. Pero necesitará tiempo para recuperarse.
Tatiana se acercó a Drex, arrodillándose a su lado. Lo miró, sabiendo que, aunque había sobrevivido, necesitaría mucho tiempo para sanar. Con una suave caricia, apartó el cabello ensangrentado de su frente y, en un gesto de afecto, lo besó en los labios.
—Descansa. Lo peor ha pasado —murmuró Tatiana, mientras Drex, aunque gravemente herido, esbozaba una leve sonrisa, sintiendo un calor reconfortante en su pecho.
Sus capacidades licántropas ayudarían a sanar su cuerpo, pero incluso Drex sabía que necesitaría algo más que tiempo para recuperarse completamente.
Oscar, que había recibido el mayor impacto del ataque del demonio, estaba en un estado crítico, al borde de la muerte. Tatiana ordenó que lo llevaran junto a Fabián para recibir atención médica urgente. La batalla había terminado, pero el costo había sido enorme. Oricalco había sufrido bajas importantes, y el equipo de purga estaba diezmado.
Con Fabián y Óscar siendo llevados de urgencia fuera del túnel, y Drex preparándose para una larga y dolorosa recuperación, el equipo de purga finalmente salió del túnel devastado. Tatiana, aunque agotada, sentía un extraño alivio mientras sostenía a Drex entre sus brazos, sabiendo que al menos él sobreviviría.
Pero había algo que Drex no podía ignorar. Aunque el demonio mayor había sido derrotado, la bestia en su interior seguía rugiendo, inquieta. Sabía que, antes de poder enfrentar la próxima misión, necesitaría salir a cazar. Era su naturaleza, y aunque estaba al borde de sus límites, su instinto le decía que aún quedaba una batalla por pelear, una batalla dentro de sí mismo.
Tatiana lo observaba, sabiendo lo que él necesitaba. Le acarició suavemente el rostro y le susurró:
—Te recuperarás. Y cuando estés listo, iremos juntos. Pero por ahora, descansa. Te has ganado un respiro.
Drex, aún en los brazos de Tatiana, cerró los ojos, permitiéndose, por un momento, sentir paz en medio de la tormenta.
Gracias por acompañarnos en este viaje al terror. ¡Nos vemos en el próximo episodio!”
¿Te gustaría disfrutar de este contenido en formato de AUDIO LIBRO GRATIS? Aprovecha!!
Recuerda que siempre puedes volver a consultar nuestros libros en formato de AUDIO LIBRO GRATIS en nuestro canal de Youtube. NO OLVIDES SUSCRIBIRTE
Recibe un correo electrónico cada vez que tengamos un nuevo libro o Audiolibro para tí.
You have successfully joined our subscriber list.
Disfruta GRATIS de los mejores libros para Leer o Escuchar sobre Esoterismo, Magia, Ocultismo.
Disfruta GRATIS de los mejores libros para Leer o Escuchar para los pequeños grandes del mañana.
Disfruta de la historia de Terror más oscura y MARAVILLOSA que está cautivando al mundo.
Retira en Nequi, Daviplata, Tarjetas Netflix, Bitcoin, Tarjeta Visa Prepagada, ETC.